lunes, 11 de abril de 2011


Todos de pequeños tuvimos miles de juguetes, a unos les teníamos más cariño que a otros pero todos eran más que juguetes al fin y al cabo. Sabemos que los juguetes no tienen sentimientos que son solo un cacho de plástico, pero aun así por que tenemos esa manía de dejarlos apartados cuando nos hacemos mayores, o peor cuando sale otro en venta. Ese típico osito de peluche al que le contábamos los secretos, todas esas Barbies con la que jugábamos y parecían que eran de verdad, esas tardes en la que le robabas en Action-man a tu hermano y lo usabas como novio para tus muñecas soñando en que algún día  tendrías uno,  esos nenucos que cuando los cogíamos en brazos pensábamos que éramos madres. Pues todos esos momentos, si te das cuanta no se borran y aunque sean solo juguetes algo inanimado, fabricado por alguien tú solo tú les dabas vida.
Ahora llegamos a la realidad donde todos nosotros utilizamos a la gente y las tratamos como míseros juguetes, algo que se hace inconscientemente, cuando éramos pequeños cada vez que había un nuevo juguete creíamos que era el mejor del mundo y que no lo íbamos a cambiar por nada, hasta el día en el que sacan uno parecido y mejor, nos habíamos prometido a nosotros mismos que nunca lo íbamos a dejar solos, cuando nos acostábamos en la cama lo arropábamos también por que sino pasaba frío de noche, que siempre iba a estar con nosotros, pero a fin de cuentas siempre lo dejábamos de lado.
Y pensar que podemos hacer eso con la gente resulta increíblemente triste, pero la verdad es que sucede, pongamos a una chica y a un chico de ejemplo, ella se siente especial por una temporada, el esta pendiente de ella no le quita ojo, se pone celoso cuando ella habla con otros, le da cariños abrazos pero al cabo del tiempo, el se distancia, se pone con otras, las mira de la misma manera, les da abrazos, las trata como si fuesen únicas.
No nos damos cuenta pero esta chica se siente utilizada, remplazada ya no se siente bien consigo misma, la han usado de mala manera, ella misma se califica con un juguete algo que estuvo allí para todos pero al cabo de una temporada lo remplazamos por una versión más nueva y mejor.
Total no es más que un juguete no tiene sentimientos ¿no?

No hay comentarios:

Publicar un comentario